A veces, no es sencillo elegir un vino y cuando lo tienes llega una pregunta a la cabeza. ¿Dónde lo guardo?
Quizá no todo el mundo pueda tener una gran bodega en su casa, pero eso no quita querer tener los vinos bien conservados. Si es tu caso sigue leyendo, este post te interesa.
CONSEJOS PARA ELEGIR TUS VINOS
Lo primero que debes preguntarte es qué vinos quieres tener: ¿qué tipos de vinos te gustan? ¿buscas habitualmente que mariden bien con la comida? ¿cambias tus hábitos de consumo en fin de semana?
- Identifica qué tipos de vinos te gustan: más allá del color, tus gustos pueden estar relacionados con las características de una variedad de uva en concreto, su origen, con la elaboración, su estructura o el final que proporciona el vino.
- La importancia de la añada: el año de la vendimia es un dato que da pistas sobre la edad de un vino.
- Piensa en qué momento lo vas a tomar: si es para consumo cotidiano, opta por vinos más ligeros y frescos, donde primen los aromas primaros. Si es para consumir de forma esporádica, decídete por vinos más complejos, con personalidad.
- Con qué comida lo vas a tomar: antes de decidirte por un tipo de vino, debes pensar en el menú o en el plato en cuestión. Se acabó lo de tintos para carnes y blancos para pescados; se trata de buscar equilibrio entre sabores y aromas, consiguiendo que se complementen y se realce, pero no olvidemos que el vino tiene como función principal saciar la sed y limpiar el paladar.
- Prueba vinos diferentes: experimenta y descubre nuevos vinos de distintos orígenes, añadas e incluso precios. Es una gran opción para conocer más sobre tus gustos y sorprender a los tuyos.
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CÓMO CONSERVAR TUS VINOS
Esto dependerá mucho de los vinos que quieras conservar, de dónde vivas, del espacio que tengas en casa y de la frecuencia del propio consumo.
Hoy día la mayoría de los vinos son comercializados en su momento óptimo de madurez, listos para ser consumidos. Sin embargo, el vino tiene la virtud de poder mejorar con el tiempo, pero no se libra del paso del tiempo.
4 reglas imprescindibles para conservar tus vinos:
- Temperatura constante: la temperatura ideal para conservar una botella es siempre inferior a 15ºC. Mantén tus botellas en un lugar fresco, bien ventilado, con una humedad entre el 60% y el 70% y sin grandes oscilaciones térmicas.
- La postura: si el vino se va a consumir próximamente, puede guardarse en posición vertical, por el contrario, si no se va a consumir de forma inmediata, debe estar en contacto con el corcho, en posición horizontal.
- Mejor a oscuras: la mayoría de los vinos están embotellados con cristal verde oscuro, para una mejor conservación. En el caso de los blancos y rosados, es aún más importante la oscuridad y los lugares poco iluminados, ya que muchos se embotellan con vidrios opacos para que se vea su color, mucho más atractivo para el consumidor.
- ¿Qué hacer con una botella abierta?: hazte con un sistema de cierre al vacío y ponle un tapón que evite el contacto con el aire y, por tanto, la oxidación.
DÓNDE ES MEJOR CONSERVAR TUS VINOS
- La cocina: es el peor sitio par conservar los vinos, ya que es donde hay más cambios bruscos de temperatura, frecuentemente hay olores intensos, mucho movimiento, el uso de varios electrodomésticos, etc. Además, es un lugar con poca humedad y casi siempre con mucha luz.
- La nevera: no es la mejor alternativa, ya que el frío excesivo y los cambios bruscos de temperatura son enemigos de los vinos. Excepcionalmente, blancos y rosados muy jóvenes y de poca complicación pueden ponerse en la nevera horas o días, si luego los abres y los dejas coger temperatura.
- En su caja: el primer problema es que el cartón es un buen acumulador de calor que puede acelerar las reacciones degenerativas y oxidativas del vino. Y el segundo problema es que las cajas están diseñadas para que las botellas se mantengan de pie, una posición que deja al tapón expuesto a la sequedad. Una solución a medias es volcar las cajas y abrirlas por el frente, guardando las botellas como si estuvieran en botelleros.
- El trastero: si dispones de un trastero subterráneo, es uno de los mejores sitios para almacenar vino en buenas condiciones, ya que es una habitación que pasa mucho tiempo a oscuras, la temperatura es mucho más baja que en el resto de la casa y no suele tener vibraciones.
Pero…¿cuál es la mejor alternativa para conservar tus vinos en casa?
- La vinoteca: son armarios similares a un frigorífico, aunque con un mayor control de la temperatura y la humedad. Eso sí, la vinoteca está pensada para conservar el vino, no para tenerlo a temperatura de servicio.
Como ves existen una serie de soluciones para conservar tus vinos sin necesidad de una gran bodega. Ahora solo te faltan los vinos.