En lo que respecta al vino, la estrategia de comunicación y publicidad ha tratado de fomentar e inducir a la moderación como única forma posible de su consumo. Para ello, el vino siempre se ha ligado a la gastronomía y a su disfrute pausado como única forma de poder apreciar todos los matices que cada copa de vino ofrece.
No obstante, conscientes de los perjuicios que puede causar en la sociedad el abuso de alcohol, en el año 2008 y en el marco del programa Wine in Moderation, la Federación Española del Vino (FEV) aprobó el Código de Autorregulación del Vino en Materia de Publicidad y Comunicaciones Comerciales, donde se obligaba incluir una llamada a la moderación en el consumo de vino.
En 2018, el sector del vino a través de Organización Interprofesional del Vino de España (OIVE) refuerza y amplía este compromiso previo con la sociedad mediante este Código de Comunicación Comercial del Vino que constituye un paso más en la responsabilidad del conjunto sector vitivinícola español. El vino está definido como alimento en la Ley de la Viña y el Vino y es un componente esencial de la dieta mediterránea.
CONTENIDO DE LAS COMUNICACIONES COMERCIALES
Las comunicaciones que se vayan a hacer sobre el vino deberán respetar los siguientes principios: Legalidad, Buena fe y Veracidad. Y en ningún caso podrán estimular el consumo excesivo o irresponsable del vino, ni presentarán situaciones de consumo abusivo.
Todos los adheridos a dicho código deberán comprometerse a la promoción del consumo moderado de vino y a la defensa de una comunicación responsable con la sociedad en la que nunca se promueva el consumo en los momentos incompatibles que se indican.
CUMPLIMIENTO Y VIGILANCIA
La OIVE encomienda al Jurado de Autocontrol el control del cumplimiento del presente código. Y la aplicación efectiva y la vigilancia del cumplimiento de estas normas será a través de los siguientes mecanismos:
- Consulta previa obligatoria
- Consulta previa voluntaria
En ambos casos, las empresas se comprometen a enviar al Gabinete Técnico de Autocontrol sus anuncios o proyectos de anuncios para su examen previo a través del sistema de consulta previa.
Cabe destacar que en caso de reincidencia o de que las empresas no hagan caso del presente código, la OIVE enviará una advertencia a modo de sanción mediante la Junta Directiva.
PROTOCOLO DE COMUNICACIÓN
La Fundación para la Investigación del Vino y la Nutrición (FIVIN) y la Organización Interprofesional del Vino (OIVE) ponen a disposición de los operadores del sector vitivinícola un argumentario que recoge aquellas preguntas y formas de actuar en relación con la comunicación del vino y sus beneficios sobre la salud y las respuestas adecuadas para despejar bulos y falsedades, tanto en sentido positivo como en negativo.
Objetivos
- Seguridad: Con este argumentario se busca ofrecer seguridad a la hora de responder ante posibles preguntas de medios de comunicación o en actuaciones ante administraciones públicas y de cara a las comunicaciones de los operadores con clientes y sociedad.
- Credibilidad: Los mensajes deben ir avalados siempre por la evidencia científica. No recurrir a meras opiniones o vaguedades ya que pueden utilizarse o malinterpretarse por medios sensacionalistas.
- Único mensaje: La utilización de este argumentario ayudará a lanzar mensajes homogéneos y sólidos, además de lograr una comunicación entre sector y sociedad clara y contundente.
Análisis de situación
Tras un periodo en el que el consumo de vino se percibía ampliamente en la sociedad como un alimento beneficioso para la salud consumido con moderación, en los últimos años se están produciendo dos corrientes con las que el sector debe estar alerta:
- La corriente anti-alcohol, donde se incluye al vino, sin distinción sobre el consumo moderado o abuso.
Estos artículos críticos normalmente no discriminan sus ataques y consideran al vino como el resto de las bebidas alcohólicas e incluso suelen hacer referencias concretas precisando explícitamente que «el vino también es alcohol».
En muchas ocasiones no se tiene en cuenta el patrón de consumo, de alimentación, la cantidad o el tipo de bebida alcohólica.
Cabe destacar que, en muchos de estos casos, solo se valoran los aspectos negativos del alcohol y no se tienen en consideración otras investigaciones científicas que han demostrado de forma consistente y repetida los efectos beneficiosos del vino sobre la salud del consumo moderado de vino, ni atienden a la transcendencia del sector vitivinícola en la sociedad española en el plano social, económico, gastronómico, medioambiental, cultural e histórico.
- La corriente que magnifica sin base científica sus propiedades e incluso es compartido por parte del sector: Desde el sector del vino, con organizaciones como FIVIN u OIVE, se trabaja para revertir esta tendencia negativa en los medios de comunicación, poniendo en valor al sector y sus productos, también en el plano saludable, y con base en la verdad de la ciencia.
¿CUÁL ES LA POSICIÓN DE LAS INSTITUCIONES SOBRE EL TEMA?
A nivel institucional existe un escenario marcado por una brecha en los posicionamientos de las dos principales áreas del gobierno con competencias sobre ello; el Área de Agricultura, pesca y Alimentación y el Área de Sanidad.
Para informar sobre las líneas de actuación del recién formado ministerio, la lucha contra el consumo de alcohol en menores es una de las principales prioridades. Esta se trabajará a partir de tres ejes:
- Profundizar en la limitación del acceso de los menores a las bebidas alcohólicas.
- Establecer mayores límites en la publicidad, incluido los puntos de venta.
- Favorecer un cambio cultural que permita trasladar a los menores el riesgo del consumo de alcohol.
RECOMENDACIONES GENERALES PARA BODEGAS Y ASOCIACIONES
Hay mensajes que pueden compartirse desde el sector y otros que no se recomiendan. Algunos de los mensajes que sí se recomiendan son:
- El vino es un alimento, y así lo recoge la Ley 24/2003 del 10 de junio de la Viña y el Vino. Además, forma parte de la dieta mediterránea y su consumo es consustancial a nuestra cultura desde tiempos inmemoriales.
- El vino contiene alcohol, pero eso no lo convierte en un producto dañino en sí mismo como señalan algunos estudios científicos de reconocido prestigio. Si se consume de forma moderada y en el marco de una alimentación equilibrada y un estilo de vida saludable, que incorpore ejercicio regular, puede tener beneficios para nuestra salud en casos determinados.
- Los productos de calidad indican unas pautas de consumo moderadas, ya que sólo si el vino se degusta de forma moderada y lenta se pueden apreciar y disfrutar plenamente su carácter y sus sabores únicos y complejos.
¿CUÁL ES LA LEGISLACIÓN EN MATERIA DE PUBLICIDAD QUE CUMPLE ACTUALMENTE EL VINO?
El vino, como no podría ser de otra manera, cumple con la normativa general de presentación y publicidad tanto a nivel nacional, como autonómico que, por ejemplo, establece ciertas restricciones a los horarios de emisión de anuncios en TV. Además, el sector del vino cuenta con un marco normativo propio en materia de etiquetado y presentación de productos.
Por último, es importante recordar que, si se siguen las pautas apropiadas de consumo moderado, y no se rebasan, el vino puede formar parte de un estilo de vida saludable y tiene beneficios en la salud, siempre hablando de adultos sanos. Por ello, es muy importante distinguir entre el consumo moderado y consumo abusivo. También hacer caso a las normas y recomendaciones que se dan y recordad el popular eslogan de Tráfico: ‘Si bebes, no conduzcas’, aunque sea una copa de nada.